Regreso al Futuro

En los últimos meses hay una frase que escucho muy a menudo: “A mí no me preocupa tanto la situación actual como la que van a pasar mis hijos el día de mañana”.  Ante tal exposición, muerdo mi lengua para no iniciar una sesión de coaching que no me ha sido solicitada. Solo si la frase es dicha delante de sus hijos es cuando me permito la libertad de realizar algún comentario, buscando la tranquilidad de esos chavales que miran a su padre con cara de asombro e incertidumbre ante el futuro que su propio padre les está vaticinando.

Recuerdo que esa frase la escuché una y otra vez a mi padre cuando yo era un niño ¿Alguna vez te has extrañado por darte cuenta de estar diciendo las mismas cosas que tus padres te decían a ti de pequeño? Efectivamente un patrón mental más que estás lanzando a los que te rodean. Seguro que no son conscientes del daño que pueden causar a su hijo diciendo la maldita frase. El niño, la grabará en su cerebro y cada vez que piense en el futuro lo verá como algo negativo, algo que le va a hacer sufrir y dará la razón a su padre por tener esa gran capacidad visionaria.

Una definición sencilla de patrón mental es aquello construido por los humanos para representar su propia comprensión del sistema, objetos y otros fenómenos. Existen infinidad de patrones mentales que son usados todo el día en multitud de ocasiones:

“No puedo”; “No valgo”; “No lo lograré”; “Siempre me pasa lo mismo”; “Yo no sé”;…

El inconsciente es nuestro gran almacén de datos. A él llega absolutamente todo. No realiza una labor de filtro, tanto lo positivo, como lo menos bueno cae en él. El subconsciente es el encargado de mezclar todos esos datos y producir un patrón mental basado en la información que el inconsciente le ha facilitado. Ante ese patrón mental generamos el mecanismo de defensa. La misión de este mecanismo es hacer que el patrón se cumpla. Por ejemplo si tengo el patrón de “mi futuro será complicado” haré todo lo posible para que eso se realice.

Pero esto no es todo. Los subconscientes de todos nosotros están unidos. Esto provoca que nos relacionemos con personas que nos van a permitir que nuestro patrón mental se cumpla. Por un momento reflexiona sobre la gente que te rodea… ¿piensa muy diferente a tí?

Afortunadamente podemos cambiar nuestros patrones mentales. En el momento que decidimos que “eso” no lo queremos e introducimos otro patrón mental (más positivo) comprobamos cómo cambia nuestra manera de afrontar el día a día. Verás como hasta te relacionarás con otras personas que coinciden con esos “otros” patrones mentales más nutritivos.

Entre las cosas que podemos hacer para alcanzar ese cambio:

* Decidir poner freno a la entrada de datos negativos y tampoco emitir datos negativos hacia los demás es un primer paso para construir nuestros nuevos patrones.

* Tomar conciencia que «mi futuro no será complicado», sino que ahora «tengo un patrón mental que me indica que mi futuro será complicado».

* Patrón que puedo cambiar por otro que me indique que «mi futuro será estupendo».

Sé que no es una labor sencilla. Cambiar algo que está instalado en nuestro inconsciente desde hace tantos años, no es tarea fácil. Sentirte acompañado de un coach puede servirte de apoyo en el camino de cambiar esos patrones mentales.

A ese padre que le preocupa el futuro que tendrá su hijo, le invito a que se ocupe del hoy que tiene, seguramente de esa manera, y sin saberlo, esté construyendo un maravilloso futuro a su hijo. De esa manera será proactivo y se estará responsabilizando de lo que le toca. Su hijo ya tendrá lo suyo.

Deja una respuesta

Por favor, inicia sesión con uno de estos métodos para publicar tu comentario:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: